Como Nutricionista, en estas fechas siempre me encuentro la misma situación, la mayoría de los pacientes comienzan a tener exceso de eventos navideños: comidas de empresas, encuentros de amigos y familiares, aumento de todo tipo de alimentos de temporada en la despensa (bombones,turrones, chacinas, licores, mariscos…), llenando más de lo necesario las reservas de alimentos en casa.
A consecuencia de esto, se abandonan los buenos hábitos adquiridos en la consulta, y no solamente durante los días puntuales sino que tantos días de fiesta acaban siendo la excusa para cometer excesos prácticamente durante todas las Pascuas.
Es preocupante encontrarse ante estudios como el publicado por The England Journal of Medicine (A prospective study of holiday weight gain),en el que se constata como existe un aumento generalizado de peso en la población tras estas fiestas familiares (mayor o menor según el estado corporal previo de cada persona).
Con esto no pretendo que se eviten las tradiciones de estas fechas y esas comiditas tan ricas, pero se pueden tener pautas para el resto de los días y que una vez finalicen las fiestas, al menos logremos mantener el peso que teníamos al comenzarlas:
– No cargar la despensa de bombones, dulces, alcohol… 2 o 3 semanas antes de Nochebuena, los supermercados cada vez comienzan antes la campaña de Navidad y provocan la compra compulsiva, teniendo normalmente que reponer de nuevo el frigorífico porque “sorprendentemente” se agotan antes de tiempo.
– No es una obligación acabar hinchado tras las comidas o cenas pertinentes, el objetivo es disfrutar de la compañía y por supuesto también de la comida, por lo tanto, come con control, lentamente y saboreando los manjares que tengas delante, sin obligarte a ingerir más de lo necesario así evitarás los problemas digestivos provocados por estos excesos (unos bailes como colofón de la fiesta siempre vienen bien para el cuerpo y la mente).
– Si tienes vacaciones, aprovecha para tener el cuerpo activo, haz algún tipo de ejercicio físico que te haga sentir bien y te ayude a aligerar el cuerpo de “las comilonas”.
– Es muy importante tener una alimentación equilibrada los días “normales”, realizando 5 comidas, bebiendo mucha agua… Aquí reside el problema más grave, pues tendemos a autoconvencernos: “ya da igual, con todos los días que estoy comiendo mal, uno más no importa”. Pues SI QUE IMPORTA. Si desglosamos los 15 días desde Nochebuena a Reyes, tendremos “malos hábitos” los días de Nochebuena, Navidad, NocheVieja, Año Nuevo, Reyes, la comida de empresa, la de amigos, y algún sábado que se escape de las manos. En total son 8 días, en los que no hay que excederse el día completo por obligación, y mucho menos los 7 restantes, que puedes aprovecharlos para comer de forma sana, variada y practicar algún ejercicio en lugar de comerte las sobras de los días festivos.
Disfruta de estos días tan entrañables, y recuerda que si realmente tienes una preocupación por tu peso y tu salud, deja la “preocupa” y pasa a la “ACCIÓN”, consulta con tu Dietista-Nutricionista y cambia tu estilo de vida.
Anabella Lara Redondo
Diplomada Nutrición Humana y Dietética
Especializada en Nutrición y Etapas Vitales