El acuerdo ha sido promovido por el Vicerrectorado de Relaciones Institucionales y Comunicación de la Universidad Pablo de Olavide
El rector de la Universidad Pablo de Olavide, Vicente Guzmán Fluja, y el cónsul general de Costa de Marfil, Jesús Mejías Begines, han firmado hoy un convenio de colaboración entre ambas entidades al objeto de desarrollar actividades prácticas dirigidas al alumnado matriculado en cualquier enseñanza oficial impartida por la UPO, o títulos propios, que contribuyan a completar su formación y a desarrollar su cualificación profesional. Este acuerdo ha sido promovido por la vicerrectora de Relaciones Institucionales y Comunicación Pilar Rodríguez Reina.
Con la firma, ambas entidades establecen un marco de cooperación educativa con el fin de regular un sistema de prácticas académicas externas para estudiantes universitarios. La UPO y su Fundación homónima por una parte, y el Consulado de Costa de Marfil por otra parte, quieren expresar su máximo interés en la formación práctica del alumnado, cuyo objetivo es permitir al estudiante aplicar y complementar los conocimientos adquiridos en su formación académica. De esta forma, se favorece la adquisición de competencias que le preparen para el ejercicio de actividades profesionales, facilitando su empleabilidad y fomentando su capacidad de emprendimiento.
Tanto el rector como el cónsul general han mostrado su satisfacción tras la firma de este acuerdo. Vicente Guzmán ha recordado que desde que su equipo de gobierno comenzó a ejercer hace cinco años, “hemos tenido el empeño de abrir la Universidad Pablo de Olavide a todos los colectivos. En este caso, creemos que era necesario establecer una relación con los consulados porque, en el contexto de internacionalización que nos encontramos, es necesaria la cooperación con los nacionales de otros países”. El rector ha señalado la importancia que tienen las prácticas regladas para los alumnos y alumnas puesto que son necesarias para obtener sus títulos, al tiempo que ha destacado que en el caso de las que se desarrollen en los consulados, tienen el plus añadido de conocer la cultura de otro país. “África es el continente que queda por emerger y nuestra mirada debe ser cada vez más frecuente y con más interés hacia este continente”, ha finalizado Vicente Guzmán.
Por su parte, Jesús Mejías Begines ha descrito la experiencia enriquecedora que puede suponer para un estudiante desarrollar sus prácticas en un Consulado. El cónsul honorario ha recordado que la oficina se abrió en 1992 con motivo de la Expo92 y, desde entonces, este empresario natural de Los Palacios ejerce como tal después de haber sido invitado a conocer el país.
Las modalidades de prácticas académicas que el alumnado podrá realizar en el Consulado de Costa de Marfil serán de dos tipos: prácticas curriculares, que se configuran como actividades académicas integradas en los planes de estudio; y prácticas extracurriculares, de carácter voluntario, que se pueden desarrollar durante el periodo de formación pero que no forman parte del correspondiente plan de estudios, aunque pueden ser contempladas en el Suplemento Europeo al título.
Además del Consulado en Sevilla en la calle Cardenal Lluch, Costa de Marfil tiene otras once representaciones en España: una embajada en Madrid y otros consulados en A Coruña, Barcelona, Bilbao, Málaga, Murcia, Oviedo, Tarragona, Valencia, Valladolid, y Zaragoza. El Consulado en Sevilla es una de las ciento veinticinco representaciones diplomáticas de Costa de Marfil, país ubicado en África occidental y antigua colonia francesa que tiene una población de 23 millones de habitantes.
